Diseño de trenes: los detalles que marcan la diferencia

¿Podrías hacernos una breve introducción de lo que hacéis en el diseño de trenes?

Natalia: Básicamente, diseñamos el tren en todas sus fases y desde todos los puntos de vista: el interior, el exterior, todo el cableado y las instalaciones mecánicas. También tenemos equipos que trabajan en el software y en los distintos sistemas mecánicos. Otro equipo se encarga de la validación antes de que el tren salga a las vías. Cubrimos todo el ciclo de vida del diseño de un tren.

¿Por dónde comienza el proyecto de diseño de un tren?

Lorena: Lo primero que hacemos es revisar los requisitos del cliente, los puntos técnicos específicos que quiere que abordemos e incluyamos en el diseño. Normalmente, el cliente nos proporciona un libro de diseño con sus requisitos estéticos. También conocemos a fondo las normas que debemos cumplir. Con esto en la mano, tomamos un proyecto anterior y construimos en torno a él.

Natalia: Como dice Lorena, el diseño interior comprende todo lo que se ve cuando se está dentro de un tren: los espacios para el equipaje, las barras y cinturones que utiliza la gente cuando está de pie en el tren, los asientos, etc. y también muchas cosas que no se ven. No solo se trata de la estética, sino también de todos los accesorios, las estructuras, incluida la cabina del conductor.

Lo que recibimos de nuestro cliente es la caja (puede ser de acero o aluminio) y diseñamos tanto el interior como el exterior, ya sea para tranvías, metros o trenes de alta velocidad y locomotoras. Tenemos amplios conocimientos sobre distintos tipos de trenes, aunque somos especialistas en trenes de pasajeros, tranvías y metros. Nuestros equipos llevan mucho tiempo trabajando en el sector ferroviario, aportando sus conocimientos sobre los distintos tipos de trenes.

¿Qué retos os encontráis?

Natalia: El sector ferroviario es un entorno que cambia rápidamente. Hay muchos proveedores, mucha gente implicada, y nuestros clientes también tienen cambios que quieren hacer sobre la marcha. Nuestro equipo de diseño tiene que seguir el ritmo de esos cambios, adaptar el diseño a la evolución de los requisitos. Estamos en contacto con el cliente a diario y tienen mucha confianza en nosotros.

¿Cuáles son las fases del diseño? 

Natalia: El diseño de un tren consta de varias fases. Al desarrollar el concepto, ayudamos a nuestros clientes a hacer realidad sus ideas: les recomendamos la mejor forma de hacer las cosas. Un miembro del equipo, nuestro Focal Point, dirige tanto el proceso de diseño como al equipo de ALTEN (en términos de carga de trabajo, plazos) desde la conceptualización hasta la fase de diseño detallado.

Lorena: El ensamblaje del tren se divide en etapas más pequeñas. Para cada montaje, hacemos un renderizado 3D basado en los requisitos establecidos en el libro de diseño; después empezamos con la parte 2D. El resultado del paquete de trabajo es un modelo 3D del tren completo y también un conjunto de dibujos que los técnicos utilizarán para montar el tren.

¿Qué herramientas usáis para todo esto? 

Lorena: Utilizamos un software de gestión del ciclo de vida del producto para garantizar que todos los miembros del equipo estén al día. Uno de los puntos fuertes de nuestro equipo es su dominio de las distintas herramientas y elementos. Elaborar la lista de materiales que necesita el cliente para el montaje del tren es muy importante. Tenemos una biblioteca de todos los elementos estándar, como tornillos, tuercas, arandelas, telas.

¿Con qué problemas os habéis encontrado?

Lorena: Es importante prestar atención a todos los detalles. Una pieza puede tener un aspecto estupendo en el diseño 3D, pero si no se presta atención, es posible que la persona que tenga que montarla no disponga del espacio necesario. Esto podría requerir modificaciones que pueden encarecer mucho el proyecto; puede que haya que descartar algunas piezas y que los proveedores tengan que fabricar otras nuevas. Con unas gafas de realidad virtual y modelos en 3D, los expertos in situ pueden ver cómo funcionará el montaje. Esto puede ser más útil que cientos de planos. 

Natalia: Una vez que terminamos el proyecto, recopilamos las lecciones aprendidas: tanto buenas prácticas como las cuestiones o problemas a los que nos hemos enfrentado en el diseño, para no repetirlos en el futuro. Al final esto evita problemas en la cadena de producción, ahorrando dinero a nuestros clientes y aumentando su confianza en nosotros.

¿En qué innovaciones estáis trabajando? ¿Hay un ‘tren del futuro’?

Natalia: Hay nuevas formas de propulsar los trenes, en lugar del gasóleo o la electricidad, que son muy interesantes. Por ejemplo, estamos trabajando para dotar a los trenes de propulsión a base de hidrógeno, algo similar a lo que ocurre en el mundo de la aviación. También existe mucha innovación en los materiales utilizados en el sector ferroviario. Una de las mayores exigencias en términos de diseño es reducir el peso del tren: es una de las cosas más difíciles de gestionar desde el punto de vista del diseño. Cada conjunto debe ser muy eficiente en términos de peso. Por eso, cuanto más ligeros sean los materiales, sin comprometer la resistencia, mejor.

Lorena: Además de piezas metálicas, utilizamos fibras. Son mucho más ligeras y pueden tomar formas estéticamente más interesantes, por ejemplo utilizando las impresoras 3D cada vez más populares en el sector ferroviario.

¿Cómo es vuestro equipo en España?

Natalia: Somos el equipo de diseño más grande de ALTEN en España y estamos creciendo. También intentamos diversificarnos, ser lo más flexibles posible a la hora de trabajar en distintos sectores. Tenemos la madurez necesaria para asumir nuevos retos y, al fin y al cabo, el diseño está en todas partes.

Estamos muy orgullosos de lo que estamos haciendo en diseño ferroviario: con calidad y a tiempo.